Ciudad de México.- El hígado graso, o esteatosis hepática, se ha convertido en una de las enfermedades más comunes a nivel mundial; caracterizada por la acumulación de grasa en las células hepáticas, no siempre presenta síntomas, pero a largo plazo puede derivar en problemas graves como cirrosis o insuficiencia hepática.
El doctor Saurabh Sethi, especialista en hígado formado en la Universidad de Harvard, ha propuesto un enfoque centrado en la dieta para prevenir y tratar el hígado graso, evitando métodos invasivos y tratamientos costosos. Aquí te explicamos en qué consiste este enfoque alimenticio.
Sethi ha destacado que la clave para revertir el hígado graso y proteger el hígado está en reducir la ingesta de ciertos alimentos y en adoptar una dieta rica en nutrientes específicos. En este sentido, el especialista enfatiza la necesidad de eliminar el consumo de alcohol y alimentos con grasas saturadas, ya que ambos factores incrementan la acumulación de grasa en el hígado y dificultan su funcionamiento.
¿Es perjudicial la dieta keto para el hígado?
Sethi advierte que, a diferencia de la dieta propuesta por Harvard, las dietas populares como la cetogénica o keto pueden resultar contraproducentes para el hígado. La dieta cetogénica, que reduce excesivamente el consumo de carbohidratos y enfatiza el consumo de grasas, podría sobrecargar el hígado y aumentar la acumulación de lípidos en el órgano. En cambio, Harvard respalda una dieta balanceada que incluye alimentos naturales y bajos en grasas saturadas, y que limita el consumo excesivo de aceites vegetales y carbohidratos refinados.
Alimentos recomendados para limpiar el hígado
A continuación, se presentan algunos de los recomendados por Harvard para desintoxicar y mejorar la función del hígado:
Café
Diversos estudios han vinculado el consumo moderado de café con un menor riesgo de cirrosis y una reducción en la severidad del hígado graso. Se sugiere consumir entre una y dos tazas al día, evitando su consumo en la noche para no afectar el sueño. La cafeína, además de estimular el metabolismo, parece tener un efecto protector en el hígado.
Vitamina E
Este antioxidante ha demostrado eficacia en la reducción del estrés oxidativo en el hígado y en la prevención de la fibrosis hepática. Entre los alimentos ricos en vitamina E se encuentran las nueces, las semillas y las verduras de hojas verdes.
Vitamina D
Estudios sugieren que las personas con deficiencia de vitamina D tienen un mayor riesgo de desarrollar hígado graso. Para mejorar los niveles de esta vitamina, se recomienda consumir alimentos como pescados grasos (salmón y atún) y frutas como las manzanas.
Dieta mediterránea
A diferencia de las dietas restrictivas, la dieta mediterránea ofrece una alternativa ideal para quienes desean mejorar la salud hepática. Este régimen alimenticio incluye una amplia variedad de alimentos ricos en fibra y antioxidantes, elementos que han mostrado efectos positivos en la función del hígado.
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