Chihuahua.- Él es el futuro sicólogo Carlos Alberto Aguilar y cuenta con veinte y cinco años de edad, vecino del barrio de Santa Rosa y quien por mala fortuna fue víctima de un accidente laboral hace un par de años en un supermercado con nombre norteamericano.
De inmediato el mundo se le vino abajo, pero gracias a su pequeña hija Sofía, se levantó y decidió dar frente de manera positiva a su tragedia.
Una inesperada ruptura medular le cambió su vida por completo y sólo pide que los chihuahuenses seamos más respetuosos con la gente que padece algún tipo de discapacidad.
“Por ejemplo, aquí en el nuevo transporte público Vive Bus he sentido una gran ayuda, pero algunos choferes carecen de capacitación e incluso son descorteses y el público usuario aún no se educa y acostumbra a viajar en este tipo de autobús por las calles de la ciudad acompañados de personas en silla de ruedas”.
A pregunta expresa mencionó que actualmente es estudiante de la carrera de sicología donde cursa ya el tercer cuatrimestre, y con un brillo en sus ojos nos informa que ya el ciclo próximo comenzará a prestar sus prácticas en alguna institución de apoyo para la población abierta o enfocado a grupos vulnerables, que requieran la ayuda de un profesional como seguramente será nuestro entrevistado.
Retomando el tema de su lesión, agregó finalmente que es gracias a la pensión económica que le fijó el Seguro Social de por vida, como logra hacer frente a sus diversos gastos escolares y cotidianos.
“Solo pido respeto a gente que como yo, tenemos la necesidad de trasladarnos en este tipo de transporte que nos ha traído muchos beneficios” finalizó antes de llegar a su lugar de destino.