**"Se acabó la pachanga en Chihuahua" dijo desde la tribuna en voz muy alta el diputado panista César Jauregui, poco antes de aprobarse la Reforma Política, para dar un aval que ya antes habían dado los 18 Congresos locales reglamentarios, y acabando así, dijo, con la falta de representatividad en el Poder Legislativo, al permitir a diputados que la sociedad no eligió con su voto. Antes, en uno de esos insólitos discursos que suele acostumbrar la diputada América Aguilar, lamentó la aprobación de la reforma al atentar contra la "pluralidad" en el Congreso, cuando es sabido por todos que esa no existe más que cuando así conviene.
De antología fue escucharla decir que hay partidos que quieren curules que no ganaron, que no merecen, cuando desde tiempos inmemoriales su familia, dueña del Partido del Trabajo y del Pasito, ha ocupado una curul gracias a las alianzas con el Revolucionario Institucional.
Allá, de pie atrás de su curul, como acostumbra estar en las sesiones el coordinador panista, sólo reía y hasta se burlaba de las palabras que le lanzaba como veneno la joven Aguilar, hasta que le tocó su turno para tomar la tribuna y entonces el diputado Jauregui se le dejó ir a la yugular, atacando precisamente esa falta de representación popular, porque "esta es la última legislatura en la que hay diputados que la sociedad no eligió", y quizá en su lugar, la diputada en vez de reír se preocupó de verdad. No así la diputada Hortensia Aragón, la segunda en la lista de oradores a favor y en contra de la reforma, quien de plano se levantó para decirle a la secretaria de Asuntos Jurídicos, Lorena Serrano, que ya Jauregui o se había pasado en el tiempo o con sus comentarios. Detalle que no pasó desapercibido por el hábil político, quien entonces se deshizo en elogios para el PRD, que "sí logró hace mucho sobrepasar el riguroso dos por ciento, que muchos partidos emergentes han desgastado. Emergentes una vez, dos, tres, pero no para toda la vida", y quizá entonces su mirada se fue de nuevo sobre Aguilar, o recordó a su familia, que ha estado en el Legislativo, con al menos uno de sus miembros, por más de 20 años.
La reforma política pues fue aprobada este martes trayendo consigo importantes cambios en material electoral que, dicen, habrán de representar ahora sí, un avance para la democracia. Pero, como siempre hay un prietito en el arroz, habrá que ver con qué salen después los partidos políticos para lograr posiciones, o qué se inventan algunos de estos para lograr el tres por ciento de votación y mantener así su registro, o a quiénes se reelige hasta por cuatro periodos consecutivos como será ahora posible, aunque como lo ejemplificó el panista, esto ha sido posible en la actualidad sin necesidad de reforma. En fin.
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