Chihuahua.- Llegó el esperado año nuevo, atrás quedan los abrazos, el ponche y los regalos, lo que sigue es enfrentar la realidad, que ya estaba ahí antes de decir Feliz Navidad y mejor Año Nuevo, pero que entre brindis y romeritos, prefiere dejarse a segundo plano, para cuando la mesa no rebose de delicias y el bolsillo apenas vaya recuperándose de tanto gasto.
Pero los buenos deseos de las festividades navideñas no alcanzan cuando la cuesta de enero ha llegado con un mazazo en el depósito de la gasolina del auto: nueve centavos más cara la Magna, once más la Premium y el diesel, todo por el doble aumento aplicado este primer día del año, por el ajuste mensual que se aplica desde el sexenio pasado y por el nuevo Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que impactará además de botanas, dulces, pan y otros alimentos, en los combustibles fósiles, avalado por nuestros queridos representantes populares en el Congreso de la Unión, que nos dieron su regalo por adelantado.
Y en los primeros meses del año, los ciudadanos veremos los efectos del trabajo legislativo, cuando haya que pagar cien pesos más por revalidación vehicular, al pasar de mil 100 a mil 200 pesos, y aunque haya el consabido descuento de inicio de año, de cualquier manera representa un aumento respecto al 2013, ya que quienes paguen a tiempo pagarán 800 pesos, 200 más que el año pasado, cuando se pagaron 600 porque el descuento fue mayor.
Otro descuento que antes fue mayor y hoy con la nueva administración se redujo un tres por ciento, es el que aplica cada año el Municipio de Chihuahua al pago del Impuesto Predial, que años anteriores lo tasó en 15 por ciento por pronto pago, y que este año lo determinó en 12%.
Las empresas también verán aumentados sus impuestos al pagar ahora el Impuesto Sobre Nóminas al tres por ciento, que según las autoridades de Hacienda será algo así como 23 pesos mensuales por empleado más, nada relevante dijo en su momento el secretario Jaime Herrera, y aunque de inicio los líderes empresariales se manifestaron contra la reforma, al final sólo quedó en eso.
Quienes tengan mascota o vivan en zonas fronterizas, o ambos casos, verán aumentado también el Impuesto Sobre el Valor Agregado en alimento o de manera general, luego de la Reforma hacendaria que homologó el IVA en las fronteras y la aplicó en los alimentos para mascotas, que quizá ahora abunden en las calles.
Así inicia este 2014, cuando a pesar de las tarjetitas llenas de esferitas, moños y palabras bellas, el panorama no resulta tan amable; los efectos de las reformas aprobadas por los legisladores comenzarán a cobrar factura más temprano que tarde, como tarde será quizá para arrepentirse de haber gastado tanto en regalos, cena y brindis. Aún así, queda la esperanza. Feliz Año 2014.