En el marco del Día Internacional de la Mujer, la ONU definió el tema del 2016: “Por un Planeta 50-50 en 2030: Demos el paso para la igualdad de género”. El propósito es acelerar la agenda para impulsar la aplicación de los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible y los compromisos en materia de igualdad de género, empoderamiento de la mujer y derechos humanos.
Es importante reflexionar el porqué de los Días Internacionales. Los organismos designan fechas para darle visibilidad a temas que requieren atención inmediata y deben ocupar un lugar prioritario en la agenda. El objetivo es sensibilizar a la población en general y a los tomadores de decisiones para llevar a cabo los cambios tan necesarios. Así, se marcan aspectos importantes de la vida humana y de la historia para solucionar problemas, mejorar la calidad de vida de las personas y procurar la universalidad de los derechos humanos.
Existe un Día Internacional de la Mujer porque históricamente hemos enfrentado situaciones de discriminación y rezago por el hecho de ser mujeres. A menudo se nos considera menos capaces que los hombres y estos códigos han sido avalados por los sistemas legales y culturales que propician la desigualdad. En pleno siglo XXI, las mujeres no son vistas como sujetos de derecho en su totalidad. La construcción social de los géneros y las relaciones inequitativas de poder siguen siendo una realidad.
A pesar de los avances en esta materia, las mujeres siguen enfrentando situaciones de violencia y desigualdad de forma cotidiana. Los esfuerzos no se han traducido todavía de manera significativa en transformaciones reales en su vida. Por eso, es importante seguir creando consciencia acerca de la importancia de la igualdad de género. El Día Internacional de la Mujer incrementa la visibilidad del tema y es una invitación para reflexionar acerca de en dónde estamos, qué se ha hecho, hacia dónde queremos ir y qué se necesita para lograrlo. Con la celebración de la valentía y la determinación de muchas mujeres que entregaron su vida a esta causa, es necesario levantar la voz para exigir más cambios y llevar a cabo acciones concretas que nos acerquen a una sociedad más justa y equitativa por el bien de todos.
Yo me sumo al mensaje de ONU Mujeres de este año. Construyamos caminos para que en el 2030 cuestiones como la violencia, la brecha salarial, el acceso a la justicia, la educación y la salud no tengan que ser analizadas desde una perspectiva de género. Todos debemos colaborar para alcanzar la igualdad absoluta. Estoy segura que es posible si empezamos cambiando paradigmas desde nuestro interior.
Imagino una sociedad en donde analizar las brechas de género pierda sentido y nadie enfrente dificultades adicionales por ser mujer; en donde el amor, el respeto, la tolerancia y la solidaridad guíen las acciones de las personas; en donde todos seamos libres de tomar nuestras propias decisiones, no exista la discriminación y nuestras hijas crezcan sin miedo. Imagino una sociedad en la que las mujeres tengan las mismas oportunidades que los hombres y ya no sea necesaria la existencia de un Día Internacional de la Mujer.
El Universal