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Como parte de la atención ofrecida a estudiantes con necesidades educativas especiales, se les ofrecen actividades de Acuaterapia, en las cuales se llevan a cabo diversos ejercicios y dinámicas dentro del agua, con lo que se logra una mejora palpable en su mejor desarrollo físico y mental.

La directora del servicio USAER 1701 T, de Servicios Educativos del Estado de Chihuahua, maestra Eva Alicia Fabro Licón, señala que este tipo de actividad representa una opción en apoyo a la rehabilitación requerida por alumnos y alumnas de esta modalidad educativa.

Durante los meses de febrero a junio se llevan a cabo una vez por semana sesiones de Acuaterapia en la alberca de la Ciudad Deportiva, con la asistencia de niños y niñas de Educación Especial, así como de estudiantes destacados, con aptitudes sobresalientes, quienes reciben estas clases.

Con una matrícula actual de 66 estudiantes en el servicio USAER 1701 T (Servicios de Apoyos a la Educación Regular de SEECH), las y los menores acuden con sus madres, padre u otros familiares, a recibir terapia en el agua, lo que es de gran ayuda en la evolución y desarrollo físico e intelectual de los alumnos, quienes son atendidos por el profesor José Alberto García Ontiveros.

Para este tipo de dinámicas, el maestro García Ontiveros utiliza diversos materiales didácticos, con el fin de realizar con el grupo una serie de ejercicios de adaptación, respiración y natación.

Explica el profesor que esas rutinas se puede evaluar la actitud y el desarrollo sicomotriz de los y las estudiantes atendidos, además de fomentar los lazos afectivos  entre padres e hijos.

A estas clases en el agua acuden por ejemplo un grupo de 22 infantes, pertenecientes a diversos planteles de Preescolar, como las escuelas “Abraham González”,  “Julio Verne” y “Ángela Peralta.”

El alumno Diego Andrés Moreno Montalvo de 5 años, es un estudiante con autismo y gracias a este tipo de ejercicios acuáticos, está mostrando actualmente una mejoría en su desarrollo, señala su papá, Adrián Moreno.

“Las terapias me han ayudado a fortalecer los lazos de confianza que antes no tenía con mi hijo, ya que él estuvo varios años viviendo con su abuela”, agregó.
Por su parte el señor Efrén Gutiérrez Vázquez, abuelo de los niños José Ángel y Jesús Alonso Gutiérrez Jasso de 4 y 5 años de edad, quienes fueron bebés prematuros, comentó que los dos menores presentan discapacidad sicomotriz e hiperactividad, pero han tenido grandes avances en su tratamiento, luego de acudir a las terapias en el agua.

Durante dos ciclos escolares, los hermanos Gutiérrez Jasso han mejorado sus movimientos físicos y evolucionado muy favorablemente en sus terapias de lenguaje, que reciben por parte del personal del USAER 1701 T.

La señora María Del Rosal Villalvazo Monzón, tía y tutora de la alumna Nahomi Guadalupe Olivas Villalvazo de 6 años de edad, quien padece de varias discapacidades, comentó que la niña acude a las terapias mencionadas y ha logrado muy buenos avances en su rehabilitación, gracias a los ejercicios y actividades en el agua.

Actualmente, explica, Nahomi, habla más claro, avisa sobre sus necesidades, reconoce objetos del hogar y se desarrolla con excelentes resultados en el nivel de Preescolar.

Entre los beneficios que se logran con la Acuaterapia, están:

Relajación general, fortalecimiento de los músculos débiles, reeducación de los músculos paralizados, mejora de la circulación, mejor coordinación y equilibrio, ayuda a las funciones pulmonares, mayor ánimo y confianza para realizar ejercicios, disminución  del dolor y espasmo muscular y aumento en la amplitud del movimiento articular.

En la Acuaterapia, papás y mamás, junto con sus hijos, desarrollan ejercicios tales como el control de la respiración bajo el agua; expulsar el aire con soplos; flotar con y sin ayuda, así como control de movimiento de brazos y piernas, todo lo cual fomenta en el binomio papa-mamá e hijos, reacciones emocionales positivas que logran un mejor acercamiento afectivo.

Además se realizan actividades en grupo, ya que éstas ayudan a obtener mejores resultados en el trabajo en equipo, con la socialización de las terapias, fortaleciendo con ello la atención a las necesidades de niños y niñas con requerimientos especiales para su mejor y pleno desarrollo físico y motriz.

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