Chihuahua.- A través de un comunicado, que se reproduce aquí de manera íntegra, el dirigente estatal del Partido de la Revolución Democrática Pavel Aguilar Raynal, convocó a la ciudadanía, a las organizaciones de la sociedad civil y militancia de los partidos de izquierda en el estado, así como a los grupos críticos del PRI, formados recientemente, a que se unan en protesta por el aumento a las gasolinas, orquestado desde el gobierno federal para afectar todavía más la economía de los mexicanos.
El aumento del combustible, es sólo una parte del proceso que ha perpetrado el gobierno federal para entregar a empresas extranjeras uno de los patrimonios de todos los mexicanos, pues a esa acción se suman otros factores que tienen desgastado al sistema político, social y económico que lleva el riesgo del estallido social, dado que la cuerda está demasiado estirada y no resistirá más.
El PRD se suma a las convocatorias de protesta para obligar a PEMEX y a la federación a revertir el daño que provocará un aumento que además estaría por encima del veinte por ciento en los precios de la gasolina y que además derivará en el aumento inmediato del costo de otros productos y servicios por el efecto dominó en las cadenas de productividad que impactarán en los ingresos de las familias más desprotegidas que ya de por sí, están por los suelos.
El presidente del PRD, Pavel Aguilar insiste en que es momento de que todos los actores políticos de oposición unan fuerzas con toda la población, de solidarizarse en una misma causa para protestar y dar marcha atrás a este proceso de exterminio económico de la clase trabajadora.
Resaltó que el PRD ha dado seguimiento a los aumentos del combustible desde que se inició con la propuesta de la reforma energética y denunciaron en su momento los efectos que ésta traería y que lamentablemente ahora padecemos, aunado a la mentira de Peña Nieto y sus operadores que prometieron no aumentar los combustibles, está detrás la entrega del patrimonio de los mexicanos a empresas extranjeras, la venta de concesiones por la instalación de gasoductos y refinerías, la falsedad sobre la libre competencia y el falso argumento de aumento en los precios del mercado internacional.
Se suma también la situación de corrupción de exgobernadores, el aumento millonario a los bonos de servidores públicos, la inseguridad en todo el país y una crisis profunda en el tema de derechos humanos, el sistema ya no da para más y la ciudadanía ya no debe tolerar estas acciones que “mueven a México” hacia el abismo y el caos.
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