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Chihuahua.- Con el documental sobre la ganadora del Premio Nobel de la Paz Nadia Murad, inició este viernes en Chihuahua la gira 2019 de la décimo cuarta edición de Ambulante, el proyecto cinematográfico de Gael Bernal y Diego Luna.  La sala llamada antes Sor Juana Inés de la Cruz del extinto Cidech, hoy Cineteca de Plaza Los Laureles, no luce ni a la mitad. 

Entre los asistentes: un hombre que llega como con una casa de campaña, después dirá que tiene 27 años viviendo en la calle y comiendo de la basura; una familia de dos adultos mayores y un hijo; y varias mujeres solas, que durante 95 minutos, poco más de una hora y media, conocen la terrible historia de la joven activista yazidi y su lucha contra el Estado Islámico, del que fue esclava sexual gran parte de su vida.  

Para la proyección de otros dos trabajos, la sala casi se llena, aun cuando sigue entrando gente a pesar de que las luces ya se apagaron, algunos entran incluso con el celular prendido ante el regaño de otros, más allá entran con vasos de café del Kaldi, que habrán de amanecer al siguiente día junto a las butacas.

El primer corto "Las visitadoras" de Sergio Blanco y Michelle Ibaven, pasa pronto; muestra a un grupo de mujeres que visitan las cárceles de Chihuahua para traducir a los acusados en lengua rarámuri, porque muchos de ellos no saben ni siquiera de lo que se les acusa; por ello, Guadalupe Pérez, la protagonista, fundó la asociación civil Nochaba nikuuroka anakupi niraa (Trabajar ayudando los unos a los otros).

El siguiente, “Cuando cierro los ojos”, es más largo y cansado, y pronto comienzan a escucharse ronquidos por aquí y por allá, mientras la historia, en mazateco, de Adela, y en mixteco, de Marcelino llena la pantalla de escenas diversas, en un ritmo lento, exasperante dice una señora, con una narración plana, dice otro joven, en subtítulos con una fuente pequeña y de color blanco sobre fondos blancos, que a veces hace inteligible el mensaje de que en una comunidad indígena cualquiera puede ser acusado, y condenado, de cualquier crimen sin ser culpable, tan solo por no contar con intérprete. 

La segunda jornada inició el sábado con otro larguísimo documental “Soles negros”, clasificado en “la ruta de lo público”, que habla de activistas y periodistas asesinados, de desaparecidos y fosas comunes por todo el país, pero que al igual que el primer documental de la gira, sólo fue atendido por cinco o seis personas, incluido el hombre ambulante que se dice amante del cine, y de nuevo los cabeceos se dejan ver.

Y luego de casi tres horas de proyección, “Amor en rebeldía” aparece como un trago de frescura, con la historia de Yan María Castro y el nacimiento del movimiento por los derechos de las personas con otras preferencias sexuales, en apenas 15 minutos, que se van entre la llegada de más personas, incluida de nuevo la familia de tres.

El último trabajo del segundo día de la gira presenta la historia de un luchador “exótico” Cassandro, nacido en Ciudad Juárez y radicado en El Paso. “Este sí promete” dice alguien mientras busca lugar en la atiborrada sala, a la que sin embargo, le falta inclinación para que la cabeza de los de adelante no moleste a los de atrás. 


“En Casa Chihuahua nos daban palomitas”, dice el hombre de la casa de campaña, “y coca” dice otro señor, ante la decepción de Tania, quien el viernes dijo ser representante de Ambulante México y ahora dice representar a Chihuahua, y quien también recibe del reclamo de que porqué en Ciudad Juárez se presentarán más documentales, y en más lugares, que en la capital donde solo en la Cineteca y en la Plaza de Armas hubo proyección. No sabe qué responder, pero pide que esas quejas las dejen por escrito en la página oficial. El hombre guarda silencio, quizá no tenga casa, pero sí acceso a Internet, dice alguien casi en un susurro.

Los 73 minutos de Cassandro, el exótico se van entre maromas, capas de lentejuelas y algunas risas del auditorio. La cámara es distinta a todos los trabajos que se han presentado, quizá porque la mujer, Marie Losier, que sigue y filma al luchador queer a todas partes habla francés. Se nota sobre todo en un rimo más ameno, en un retrato más intimista que hace del personaje, que entonces se ha ganado al auditorio, entre el que ya no está la familia, y en el que sin embargo, varias sillas van quedando vacías antes del final, listas para la tercera jornada de la gira, que cierra en Chihuahua este domingo con “Disparos” de Elpida Nikou y Rodrigo Hernández y “América” de Erick Stoll y Chase Whiteside; mientras en Juárez continuará hasta el día 11.

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