Chihuahua, Chih.- Unas personas formadas por curiosidad, otras con verdaderas ganas de hacer un libro, otras tantas nomás porque sí. Los números fríos dicen que la tarde de este martes, se distribuyeron de forma gratuita más de cinco mil libros en el Centro Histórico de la ciudad, la realidad esperanzadora es que miles de personas se interesaron por llevarse más de un ejemplar de la colección “21 para el 21”.
Ubicadas a lo largo de la calle Libertad hasta llegar a una cuadra de la Casa Sebastián, a cuyo exterior se ubicó la última, las estaciones de entrega lucieron largas filas que, en algunos casos como la ubicada fuera de Casa Chihuahua, daban la vuelta incluso a todo un edificio, como lo fue el Palacio de Gobierno.
Adentro, las autoridades de la Secretaría de Cultura municipal y estatal, y del Fondo de Cultura Económica, dieron el arranque oficial a lo que fue llamado “1 kilómetro de libros”, que consistió en que las personas podían adquirir un tomo en cada una de las cinco estaciones, al final cada quien tendría cinco, aunque desde luego no faltó quien terminara con más o con menos, depende la suerte y las ganas de esperar en las filas.
Ahí en las mesas, atendidas por personas voluntarias de Salas de Lectura, coloridos se ofrecían los 21 títulos de esta nueva colección del Fondo, que según su representante Ezra Alcázar se imprimieron con una inversión de 45 millones de pesos del Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado, a razón de dos millones 100,000 ejemplares; así como de la serie “Bárbaros Ilustrados” del Programa Editorial de la Secretaría de Cultura Estatal, y otros más del Programa Editorial de Chihuahua del Gobierno Municipal, cuyos fragmentos fueron leídos también al oído por mediadores de lectura, a través del recorrido.
En esta colección lo mismo se incluyen reediciones de joyas como “Tiene la noche un árbol” de Guadalupe Dueñas y “Río subterráneo” de Inés Arredondo; que grandes clásicos como “Los de abajo” de Mariano Azuela; “La sombra del caudillo” del chihuahuense Martín Luis Guzmán y “Tiempo de ladrones” de Emilio Carballido, entre otros; así como una Antología de poesía mexicana del Siglo XIX. De todo para todos los gustos y opiniones.
Y así, mientras un diputado local propone eliminar la ley de fomento a la lectura y alguien llegó gritando a quienes esperaban por sus libros su “incredulidad” por “hacer fila para obtener basura, mejor que les den 200 lanas”, como dijo un hombre en muletas y muy enojado, miles de personas acudieron por sus libros, los primeros para iniciarse en el disfrutable hábito de la lectura o uno nuevo, que les llene no solo la biblioteca sino el espíritu.
Hola, déjenos un comentario