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Por Margarita Muñoz.- La aparición de un nuevo libro  siempre es motivo de celebración, sobre todo cuando se trata de la obra de una poeta que está destacando en el universo literario de nuestro estado. Escribir poesía siempre es hacer magia; es este el caso, cuando Ruby nos invita a acceder a su mundo. Un mundo íntimo en el que se crea y recrea sus vivencias, su sentir, su visión de la vida.

La poesía es siempre un pasaporte a la vida, escribirla es como hablar en lenguas, igual hablas del gozo del amor en pareja, como de la muerte y los fantasmas de la  ausencia; así también compartes el amor fraterno y filial, con el mismo exquisito sentimiento con el que cuestionas la existencia de Dios al que le hablas como igual. 

Así es la poesía de Ruby, los versos que ella escribe son sencillos y directos, el poema se explica por sí mismo; sus versos  encuentran su ritmo, su tono intimista y su coloratura a medida que avanzamos entre las páginas de su libro. 

En este libro Ruby Myers, canta, llora y sonríe al dolor de la muerte, así como canta y baila con el gozo cotidiano de vivir  y establece un diálogo, una conversación íntima entre ella y sus amigos, -así nos convierte cuando la leemos- e invita a entrar en ese mundo tan propio, en esa trama que ella teje desde su experiencia, y que es el resultado de su caminar entre libros y de su fino instinto que como poeta posee. 

Es un libro de gran alcance, ya que gracias a su lenguaje y a esa sensibilidad que posee Ruby Myers, quizá sin ella proponérselo, puede llegar a  todos los lectores sin distinción alguna, lo cual es algo que no todos los escritores pueden lograr. Su autora se despoja del lenguaje pretencioso del  que algunos  autores hacen gala, y de esta forma logra  tocar las fibras más sensibles de quienes la leen. Algo muy valioso en estos tiempos tan alejados de lo realmente importante como es la solidaridad y la comunicación humanos.

A presentarse este viernes en el Museo Casa Redonda en punto de las 19:00 horas, los comentarios al libro están a cargo de dos distinguidos poetas de Chihuahua: Arturo Loera y Erbey Mendoza lo que, sin duda, dará más realce a esta presentación, 

Este libro tiene además de su calidad escritural, otras virtudes; su publicación estuvo a cargo de Medusa Editorial, la cual dirige con gran acierto, otro gran poeta y ahora editor Edgar Trevizo, mismo que  está logrando acceder al mundo de las publicaciones gracias a su talento y visión. Trevizo posee una sensibilidad exquisita y  su trabajo editorial, está tomando un lugar muy importante en el mundo de las publicaciones, lo cual no se restringe a nuestra ciudad, sino que ya trasciende las fronteras del  estado, gracias a la calidad y al cuidado que pone su director en todo lo que publica.

Esta hermosa edición, viene a acrecentar el catálogo de libros que ha publicado Medusa Editorial, las que gozan de un bello diseño, contenidos valiosos, un cuidadoso y respetuoso trato a los autores, aspectos que la convierten en una empresa a la que vale la pena seguirle el paso, ya que nos seguirá deleitando y sorprendiendo con sus publicaciones.

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